Fue construida para comunicar la antigua ciudad de Valladolid con la capilla dedicada a la Virgen de Guadalupe. Este templo ha desaparecido y en su lugar está el Templo de San Diego. Es conocida popularmente como Calzada de San Diego o Calzada de Guadalupe. A finales del siglo XVIII se remozó este espacio y se colocaron lozas de cantera y se instalaron bancas de cantera, así como una serie de fresnos que adornan todo el paseo. A lo largo de la calzada se pueden admirar las que fueron casas de verano en los siglos XVIII y XIX (Destinos México 2022).

Esta amplia calzada fue mandada a construir por el obispo Escalona y Catalayud y diseñada por José Servín. Se concluyó en 1732 con el fin de comunicar el centro de la ciudad con la zona oriente, en donde se había establecido el Santuario de Guadalupe. Inicia en uno de los tres arcos más altos del acueducto y corre en sentido diagonal al mismo (Ojeda 2017:153).

Este espacio ha sufrido varias intervenciones a través del tiempo. A finales del siglo XVIII se incorporaron bancas y losetas de piedra para facilitar el trayecto. Se han sembrado también diversas especies vegetales y colocado alumbrado público. En el año 2003 se llevó a cabo una intervención en la Calzada que le devolvió su majestuosidad (Ojeda 2017:153).

En la licencia de obra que emitió el Arq. Carlos Hiriart Pardo, Director del Centro INAH Michoacán, menciona que se autoriza al C. Arq. J. Arturo Nuñez, como responsable de obra conjuntamente con el H. Ayuntamiento de Morelia para que se realice la restauración parcial de la Calzada dado que la obra se inició sin licencia y se deberán realizar trabajos de desmonte de baldosas y guarniciones de cantería, siendo numeradas para su posterior anastilosis, así como el mejoramiento del terreno tendiendo base hidráulica de material pétreo cementada, capa de tepetate compactada y sobre esta, firme de concreto simple con electromalla de refuerzo. También se deberá proceder a la demolición del firme de concreto en el área debido a que esto altera sustantivamente el proceso constructivo original implicando el desbaste en algunas de las baldosas representando un daño irreparable debiendo engrosar la capa de tepetate. Es factible asentar las baldosas de cantería con arcilla natural del sitio respetando la dimensión de la junta existente en el área colindante al oriente quedando al nivel de la superficie de las baldosas. El lavado de baldosas se deberá realizar con Canasol (detergente químico no iónico) y agua limpia. Xité (detergente de origen vegetal) y agua limpia (Hiriart 2005).

En la licencia de obra que emitió la Dra. en Arq. María Lizbeth Aguilera Garibay, Directora del Centro INAH Michoacán menciona que se autoriza al C. Ing. Fernando Martínez Ibáñez como responsable de obra conjuntamente con el H. Ayuntamiento de Morelia, propietario del inmueble ubicado en la Calzada Fray Antonio de San Miguel, para que realicen obra nueva que consiste en la colocación de diversos elementos que comprenden la iluminación y base de cantería labrada de forma rectangular de 40x40 cm de altura máxima a nivel de piso, retiro de acabado en pavimentos (empedrado-baldosa de cantería), excavación y colocación de tubería para alimentación eléctrica subterránea, cableado eléctrico y exposición de acabado en pavimentos (Aguilera 2007).

En el Oficio que emitió la Dra. en Arq. María Lizbeth Aguilera Garibay, Directora del Centro INAH Michoacán dirigido al C. Ing. Fernando Martínez Ibáñez menciona que una vez revisado el proyecto presentado, se define que no existe inconveniente por parte de este Instituto para que se lleven a cabo los trabajos proyectados, por lo tanto, para poder otorgarle la licencia solicitada, se deberá presentar fianza por $100,000.00 (CIEN MIL PESOS CERO CENTAVOS M.N) que garantice a satisfacción de este Instituto el pago por los daños que pudiera sufrir el monumento histórico inmueble en la ejecución de los trabajos de iluminación de acuerdo al dictamen elaborado (Aguilera 2007).

Este inmueble es monumento histórico de acuerdo a los artículos 35 y 36 fracción I de la Ley Federal sobre Monumentos y Zonas Arqueológicos, Artísticos e Históricos publicada en el Diario Oficial de la Federación, el 6 de mayo de 1972, que establece: “por determinación de esta Ley son monumentos históricos: Los inmuebles construidos en los siglos XVI al XIX, destinados a templos y sus anexos; arzobispados, obispados y casas curales; seminarios, conventos o cualesquiera otros dedicados a la administración, divulgación, enseñanza o práctica de un culto religioso; así como a la educación y a la enseñanza, a fines asistenciales o benéficos; al servicio y ornato públicos y al uso de las autoridades civiles y militares y las obras civiles relevantes de carácter privado realizadas de los siglos XVI al XIX inclusive” (Ley Federal sobre Monumentos y Zonas Arqueológicos, Artísticos e Históricos 1972: 9).

El inmueble está incluido en el Decreto de Zona de Monumentos Históricos en la Ciudad de Morelia, Diario Oficial de la Federación (Gortari 1990: 35).

El inmueble se encuentra dentro del polígono que comprende la inscripción de patrimonio mundial, “Centro histórico de Morelia” emitida por la UNESCO en 1993 (UNESCO 1993).

**Rubro con información adicional